No es un secreto que las juntas ejecutivas de muchas empresas vienen exigiendo una transformación digital, especialmente en esta coyuntura mundial de pandemia, pero a muchos ejecutivos les resulta difícil saber realmente por dónde empezar este proceso de cambio. Ante esta dificultad, es fácil quedar paralizado ante las posibilidades y consecuencias, por lo que surge en muchos una duda: ¿Cuáles son los mayores errores de estrategia digital que debemos evitar?
“Más del 80% de los CEO que respondieron a nuestra encuesta anual para directores ejecutivos dijeron que tienen un programa de transformación digital en marcha para hacer que sus empresas sean más digitales”, dice Mark Raskino, analista vicepresidente distinguido de Gartner. "Sin embargo, nuestras encuestas de los últimos años también han mostrado una falta de penetración por parte del cambio de modelo de negocio, entre otros indicadores, lo que nos hace pensar que muchas de estas iniciativas digitales pueden no ser transformaciones corporativas lo suficientemente profundas".
El éxito de la transformación digital debe operar en tres niveles: gobernanza corporativa, gestión y ejecución. El problema radica en que las empresas cometen errores en todos estos niveles y terminan frustrando la transformación. Saber dónde pueden ocurrir esos errores podría ayudar a evitar caer en estas trampas.
1. Malinterpretar el verdadero alcance del cambio digital
A veces, una empresa puede interpretar erróneamente una situación desde el principio, por ejemplo, al desacertar su juicio sobre cómo las fuerzas digitales podrán cambiar la industria, o al tener una visión corporativa insuficiente para aprovechar la innovación de productos y modelos de negocios. No tener una comprensión sólida de lo que está sucediendo en su industria puede llevar a un cambio superficial para cualquier transformación digital. Según Raskino, las organizaciones deberían pensar en términos de usar lo digital para reinventar lo que hace su industria.
2. Demasiado pensamiento interno
Con mucha frecuencia, las organizaciones se centran en lo que quieren hacer en lugar de analizar las necesidades de los clientes y las oportunidades que estos presentan, lo que evidencia además, una visión insuficiente del mercado competitivo para obtener ejemplos y lecciones. Raskino señala que este tipo de pensamiento hace suponer que el cambio digital es solo otro cambio de modelo operativo, pero ese no es el caso. “Un enfoque de modelo operativo no considera al mercado en general. Se centra principalmente en la eficiencia y la eficacia. Un enfoque de modelo de negocio considera el mercado y cómo se monetiza. Una perspectiva de afuera hacia adentro es de lo que dependen los proyectos de transformación digital más exitosos”, dijo.
3. "No es mi trabajo"
Algunas juntas directivas tratan la transformación digital como un asunto de gestión y no como parte de su función. Por otro lado, algunos miembros del equipo ejecutivo evitan el tema y lo tratan como algo que solo corresponde al departamento de TI. Este comportamiento de disociación vertical impide cambios reales. La transformación digital debe ser parte integral de la misión de la organización y para el núcleo de sus líderes. Si no es así, se pueden lograr algunos avances irregulares, pero el progreso transformacional siempre terminará eludiendo a la empresa, derrochando tiempo y recursos.
4. Lo digital no está definido, los objetivos son vagos
Otro error de estrategia es no tener un plan concreto, o lo que es igual, cuando la organización tiene una visión vaga y confusa de la transformación digital porque no se ha definido. Existen aspiraciones y una colección de proyectos geniales, además de voluntad, pero no hay especificidad sobre lo que realmente trata el viaje digital. Las organizaciones deben definir sus objetivos, establecer metas y métricas específicas, y luego medirlas para asegurarse de que el proyecto de transformación esté bien encaminado.